Muchos se plantean qué estudiar al terminar los estudios formales. Puede parecer un sinsentido, pero no lo es. Es cierto que tener una base teórica sólida es esencial para empezar una carrera profesional. Sin embargo, cada vez es más necesario completarla con lo que se llaman soft skills. A continuación, vemos por qué.
La formación continua y práctica te hará brillar
Un informe sobre las perspectivas de empleo y las competencias profesionales del futuro indicaba lo siguiente sobre las necesidades cambiantes de las empresas:
“Las empresas están evolucionando hacia estructuras más planas y transversales, con modos de trabajar diferentes […]. Estas tendencias requieren conocimientos y capacidades distintos, con mayor énfasis en el trabajo en equipo, la comunicación, el liderazgo, la negociación o el sentido emprendedor, así como unas actitudes profesionales diferentes.”
¿Sabías que el 72% de las grandes empresas tienen dificultades para cubrir los puestos de trabajo que ofrecen? ¿Y que el 90% ve insuficiente la formación práctica de los universitarios?
No lo podemos negar, el camino de las aulas a los puestos de trabajo es todavía largo. El sistema educativo está diseñado para proporcionar una base sólida en conocimientos teóricos, pero a menudo no proporciona la oportunidad de poner en práctica lo aprendido en situaciones reales.
En este contexto, quien se forme en habilidades que pueda poner en práctica en el mundo laboral, tendrá una ventaja. Las soft skills vienen pisando fuerte, y trabajarlas puede convertirte en un mejor profesional.
Formación en comunicación
El área social y comunicativa es una de las áreas en las que más cojean los licenciados universitarios. A pesar de que su formación profesional cumpla con lo esperado, tiemblan como hojas al viento a la hora de presentar o son incapaces de gestionar su vocabulario bajo presión.
Llevar a cabo un plan de formación para hablar en público o simples actividades educativas dentro de una rutina son opciones tan serias como dinámicas. Y pueden implementarse desde la empresa o iniciarse por decisión propia.
De esta manera, es vital trabajar en el área social y comunicativa para mantener relaciones positivas, trasmitir ideas y objetivos o promover el desarrollo personal y profesional. Algunos aspectos comunicativos que podrían mejorarse son:
- Presentaciones en público
- Escritura profesional
- Negociación y resolución de conflictos
- Desarrollo del liderazgo
- Habilidades interpersonales
Existe infinidad de opciones para mejorar la comunicación, tanto dentro como fuera del ámbito profesional. Para un individuo, es importante identificar sus flaquezas para diferenciarse y comunicar sus ideas de manera efectiva en el trabajo. Para una empresa, es crucial dar valor al desarrollo continuo de los empleados, para disponer de un equipo de profesionales formado y hábil social y comunicativamente.
En este video, el experto Andrew Stanton explica por qué hablar no es lo mismo que comunicar y nos da las pautas para alcanzar nuestros objetivos a través de la comunicación.
Formación en idiomas, una buena opción si te preguntas qué estudiar ahora
Estudiar un máster fuera del país o, mejor aún, pedir un traslado a una región con otro idioma es la clase de actividades que alimentan un currículum o fomentan el desarrollo profesional de un trabajador. Los entornos distintos obligan a adaptarse, y el estudio o el trabajo azuzan la velocidad de adaptación.
Además, zambullirse en otra cultura, aunque esta se limite aparentemente al uso de otro idioma, ayuda a crear otra perspectiva, tanto personal como laboral. Los beneficios para ambas partes son incontables, veamos cómo puede ser positivo para una empresa:
- Expansión internacional. Al trasladarse a otros países o regiones donde se hablen otros idiomas, la empresa expandirá también sus operaciones y entrará en nuevos mercados.
- Diversidad cultural. Con trabajadores formados en idiomas y culturas, la empresa se beneficiará de una mayor diversidad de pensamiento y perspectivas. Esto, a su vez, fomentará la creatividad, la innovación y la resolución de problemas desde diferentes enfoques.
- Acceso a nuevos clientes. Al contar con trabajadores que hablen el idioma local, la empresa podrá comunicarse de manera más efectiva con nuevos clientes. Esto facilitará la construcción de relaciones más sólidas y el establecimiento de una base de clientes más amplia.
¡Pero hay más! Para el trabajador, el traslado y la inmersión en otra cultura también conllevan efectos positivos en su trayectoria profesional. Veamos cuáles.
- Desarrollo profesional. Al adquirir nuevas habilidades lingüísticas y culturales, el trabajador ampliará el conjunto de sus habilidades y mejorará su empleabilidad tanto en la empresa actual como en futuras oportunidades laborales.
- Experiencia multicultural. Vivir y trabajar en otro país o región brinda una oportunidad de aprender sobre tradiciones y costumbres ajenas, además de desarrollar una mentalidad global. Sin duda, esto enriquecerá su perspectiva personal y profesional.
- Desarrollo de redes profesionales. El trabajador tendrá la oportunidad de construir una red de contactos profesionales internacionales. Estas podrán abrir puertas a oportunidades futuras y proporcionar un valioso apoyo tanto dentro como fuera de la empresa.
Formarte más allá de la universidad significa fortalecer tu futuro
¿Te preguntas qué estudiar ahora que has acabado la universidad? Ten en cuenta que, cada vez más, las empresas necesitan perfiles dinámicos y comunicativos, capaces de trabajar en modelos de proyectos distintos.
En este contexto, la formación sirve para renovarse y mejorar las maneras de hacer. Ya sea en idiomas o en comunicación, es un camino para fortalecer tu futuro y el de tu empresa. ¡Desde Ontraining te animamos a que lo emprendas!